El número dos mundial se deshizo de su rival por 6-1, 6-0 y 6-3 en una exhibición implacable de apenas una hora y 36 minutos.
"Jugué muy bien, para ser honesto, desde el principio hasta la última pelota", se felicitó el español.
Campeón en Nueva York en 2022, Alcaraz pidió disculpas al público por el escaso tiempo que pudieron disfrutar de su juego.
"Me tengo que disculpar con la gente, pero yo debo hacer mi trabajo", dijo con una sonrisa. "Cuanto menos tiempo esté en la pista, mejor para mí, para estar más listo para el siguiente partido", agregó.
"Cada vez que entro en la pista, espero hacerlo lo más corto posible", reconoció el murciano, que está en un momento de forma irresistible con cinco títulos logrados en siete finales consecutivas desde abril.
A su debilitado oponente le sobrevino un huracán de tenis nada más pisar la pista central de Flushing Meadows en el inicio de la sesión nocturna.
Actuación perfecta de Alcaraz
El italiano, con su palmarés ATP por estrenar, apenas logró arañar cuatro juegos en una noche en que no tuvo una sola oportunidad de break.
Carlos no se desconectó en ningún momento de su misión y elevó su contador hasta los 32 golpes ganadores, por 11 de Mattia, quien lanzó varias miradas de impotencia a su equipo en la grada.
El ex número uno mundial no ha cedido un solo quiebre en sus dos primeros cruces del torneo, en el que está mostrando su mejor tenis en Nueva York desde conquistó el trofeo a los 19 años.
Este triunfo obliga al también italiano Jannik Sinner a superar el jueves su cruce de tercera ronda frente al australiano Alexei Popyrin para no perder el liderato de la ATP a manos de Alcaraz.
El próximo rival del español será también transalpino, Luciano Darderi (34), con quien nunca se ha enfrentado.