Centro de estadísticas del Unicaja Málaga-UCAM Murcia
Con la inercia de celebrar junto a los suyos el nuevo título de campeón de la Basketball Champions League, salió el Unicaja mandón con un 10-2 que obligó a Sito Alonso a parar el partido. La zona que tan buenos resultados le dio la pasada temporada en el Martín Carpena penalizó el tiro exterior de los malagueños, pero no evitó canastas fáciles en su zona. La reestructuración en el UCAM tras el tiempo muerto surtió efecto y, a pesar del dominio reboteador -15 a 9- de los locales, lograron parar la sangría y finalizar los 10 primeros minutos sólo cuatro abajo, 17-13.
Un tanteo tan reducido se explica por el pésimo acierto de ambos desde el perímetro (0/6 los verdes, 3/12 los pimentoneros). Un porcentaje que siguió siendo nefasto en el segundo cuarto para un cuadro andaluz que fue perdiendo consistencia ofensiva y que no anotó su primer triple hasta el minuto 15. Por entonces, los universitarios ya habían saboreado su primera ventaja gracias a un excelso Radovic, autor de 11 puntos al descanso. Pero un lanzamiento de Osetkowski sobre la bocina permitió a los malagueños marcharse por delante al vestuario (36-35).
Sin embargo, en la vuelta al parqué, se confirmó que no era el día de los muchos y buenos tiradores cajistas. Y eso lo aprovechó el UCAM para incluso disfrutar de cinco puntos de ventaja (41-46). Apareció entonces Alberto Díaz, al que flotaban en el tiro, para liderar a los suyos en la remontada y entrar en el último cuarto de nuevo mandando en el electrónico (61-57).
Descalificante al capitán del Unicaja
Una racha que prosiguieron los de Ibon Navarro, que se soltaron la melena con triples seguidos de Perry, Tillie y Kalinoski. Parecía ya el acelerón definitivo (72-58, min. 32). Pero entonces ocurrió lo inesperado, como que los árbitros sacaran de quicio al capitán del Unicaja, un Alberto Díaz que fue castigado con una técnica descalificante tras su airada reacción a una falta, que era su quinta y que consideró, como otra anterior, que estaba mal pitada. Esto permitió a los universitarios ponerse 76-79 a tres minutos del final. Nuevo partido, pues.
Al último minuto, y tras alguna polémica arbitral más, se entró igualados a 81. Tillie, muy entonado, no dudó en jugársela de tres y ¡bingo! Birgander recibió falta, falló el segundo tiro libre, pero el rebote se lo quedaron los suyos hasta que el ala-pívot francés taponó para permitir al Unicaja sentenciar en el siguiente ataque. Se la jugó Carter, MVP de la final de la BCL, pero erró. Ennis intentó otro triple para ganar, pero Kurucs se hizo con el rebote para igualar a 84 a 1.4 segundos. Osetkowski tuvo el último lanzamiento, pero falló y la prórroga fue inevitable.
Tiempo extra
El inicio de esos cinco minutos de añadido fue demoledor con el Unicaja enrabietado y protagonizando un 7-0 con los Tyson, Pérez y Carter, on fire. Ahí ya no pudo reaccionar nuevamente el UCAM, quedándose la victoria en Málaga.
Los MVP
Gates, con 17 puntos y 8 rebotes, fue el más completo de un UCAM que tuvo con 18 puntos a Ennis como máximo anotador. En el cuadro cajista, Carter fue su MVP con 12 puntos y 8 asistencias, compartiendo liderato anotador con los 15 de Tillie, 14 de Kalinoski y Perry, y 13 de Taylor.