Shai Gilgeous-Alexander (Oklahoma City Thunder)
Primer canadiense desde Steve Nash (2005) en ser distinguido como Jugador Más Valioso (MVP) de la ronda principal de la NBA, SGA superó claramente en la votación a su predecesor Nikola Jokic (Denver Nuggets) en esta ocasión. Gilgeous-Alexander no sólo llevó a Oklahoma City al primer puesto de la liga con 68 victorias en 82 partidos, sino que también se hizo con el título de máximo anotador con una media de 32,7 puntos.
Es el tercer MVP del club tras Kevin Durant (2013/14) y Russell Westbrook (2016/17) y ahora se dispone a llevar el Trofeo Larry O'Brien a una franquicia que sólo ha triunfado una vez hasta ahora, en 1979 antes del traslado bajo el nombre de Seattle SuperSonics.
Mark Daigneault (Oklahoma)
Paso a paso, las cosas fueron hacia arriba. Durante cinco años, Mark Daigneault fue entrenador de Oklahoma City Blue, el equipo de la franquicia en la G League de la NBA. Tras un interludio como entrenador asistente en OKC (2015/16), el ahora técnico de 40 años volvió a ocupar el cargo en 2019/20 y sustituyó a Billy Donovan (ahora Chicago Bulls) como entrenador jefe para la temporada 2020/21 y fue el responsable de la reconstrucción.
Después de tres años difíciles, Daigneault llevó al equipo al primer puesto del Oeste en 2023/24 y fue galardonado como Entrenador del Año de la NBA. El año pasado, el equipo cayó eliminado en los cuartos de final de los playoffs contra los Dallas Mavericks (2-4), pero ahora el entrenador va a por el premio gordo con OKC.
Tyrese Haliburton (Indiana Pacers)
Sin Haliburton no hay final. A eso se reduce todo. El escolta de Wisconsin, campeón olímpico en París, ha llevado a los Pacers hasta la postemporada. Su media de 18,8 puntos y 9,8 asistencias habla por sí sola, y el jugador de 25 años ha superado la barrera de los 30 puntos en tres ocasiones en lo que va de campeonato.
Tyrese llegó a los Pacers procedente de los Sacramento Kings en febrero de 2022 como parte de un acuerdo de seis jugadores, e Indiana ha vuelto a las finales por primera vez en 25 años. En 2000, los Pacers perdieron cayeron por 4-2 ante Los Ángeles Lakers y aún no han ganado ningún título.
Pascal Siakam (Indiana)
Pascal Siakam sabe cómo ganar la corona. El camerunés lleva jugando en la NBA desde 2016 y fichó por los Pacers en enero de 2024 tras casi ocho años en los Toronto Raptors. En 2019, el alero formó parte del primer equipo canadiense que triunfó en la liga profesional norteamericana; Siakam fue galardonado como el jugador con mayor mejora de rendimiento (MIP) en la temporada del campeonato.
En la semifinal de este año contra los New York Knicks (4-2), el jugador de 31 años no sólo fue el máximo anotador de su equipo en el último partido (31 puntos). También anotó en el segundo partido (39) y en el cuarto (30). Mucho dependerán los suyos de él en la final.
Rick Carlisle (Indiana)
Carlisle vivió su gran día como entrenador el 12 de junio de 2011 en Miami. El técnico de 65 años ganó el título con los Dallas Mavericks de Dirk Nowitzki y ahora, como entrenador jefe de los Pacers, puede conseguir que el de Würzburg siga siendo el único alemán campeón de la NBA.
Rick trabaja en Indiana por tercera vez; primero fue entrenador asistente en el club (1997-2000), luego se erigió en entrenador jefe por primera vez (2003-2007) y, tras su paso por Dallas (2008-2021), el estadounidense regresó a los Pacers (desde 2021).
A Carlisle le espera su tercera corona, ya que ganó el campeonato como profesional con los Boston Celtics en 1986 junto a grandes como Larry Bird y Kevin McHale. Por cierto, Bird fue el entrenador jefe de la última aparición de los Pacers en la final, en el 2000, y R. Carlisle fue uno de sus ayudantes.