En la pista, Dinamarca confirmó su supremacía en el balonmano. Los nórdicos han conseguido su cuarto Mundial consecutivo tras los conquistados en Dinamarca-Alemania 2019 ante Noruega, en Egipto 2021 frente a Suecia y en Polonia-Suecia 2023 contra Francia. Con estos cuatro entorchados, los daneses igualan a Rumanía y Suecia en el palmarés y sólo tienen por delante a Francia, con seis. Nadie había ganado cuatro Mundiales de manera consecutiva hasta la fecha.
En la primera parte, Croacia resistió. Pero Dinamarca impuso su ritmo, con un gran acierto goleador y acabó yéndose a vestuarios con una renta de cuatro goles (12-16). Fue un desafío entre Ivan Martinovic (cinco goles de siete lanzamientos en la primera mitad) y el mejor jugador del torneo, Mathias Gidsel (5/5 con un lanzamiento exterior impecable) y Emil Jakbosen (5/7). A destacar, el partidazo de Emil Nielsen en la portería una vez más.
Huracán Gidsel
En la segunda mitad, Dinamarca fue un auténtico vendaval y se escapó pronto en el marcador, alcanzando rentas de nueve goles que le hacían presagiar un final muy cómodo. Gidsel se confirmó como el heredero de Mikkel Hansen y acabó el partido con 10 goles de 11 lanzamientos y cuatro asistencias, ganando el Mundial, el MVP y el trofeo de máximo goleador.
Sin embargo, los croatas tiraron de orgullo y se pusieron a cinco goles a seis minutos del final (23-28). Pero una jugada de Dinamarca acabó en siete metros y en la expulsión de Srna y las cosas volvieron a su cauce con los nórdicos controlando el partido. Los daneses se consolidan como vigentes campeones olímpicos y del mundo.
Domagoj Duvnjak, en su retirada del balonmano, anotó de manera testimonial el último gol del partido.
Francia se lleva el bronce
En el encuentro por el tercer y cuarto puesto, la selección revelación, Portugal, se ha quedado a las puertas de conseguir su primer metal en la historia de los Mundiales, tras perder por un sólo gol contra Francia: 35-34. Aymeric Minne con 10 goles en los franceses y Kiko Costa y Víctor Iturriza con ocho y siete dianas en los lusos, respectivamente.