México pasó a organizar la competición después de que la liga de ese país junto a las de Puerto Rico y República Dominicana anunciaran la semana pasada que no jugarían en Venezuela.
El antiguo anfitrión insistió hasta el final en que podía organizar la Serie del Caribe. No están claras las condiciones en las que salió del torneo: nunca lo comunicó públicamente.
La Confederación de Béisbol Profesional del Caribe (CBPC) incluyó en el calendario de la ahora serie en Jalisco a Puerto Rico, República Dominicana, dos equipos del anfitrión México y Panamá, en condición de invitado.
Quedan fuera Venezuela, que integra la confederación, así como Cuba y Colombia, usuales invitados.
El torneo se disputará del 1 al 7 de febrero.
Un asunto político
Estados Unidos movilizó una gigantesca flota militar en el Caribe, que el presidente venezolano, Nicolás Maduro, asegura que tiene como objetivo su derrocamiento.
El despliegue llevó al bombardeo de supuestas narcolanchas, la incautación de buques petroleros sancionados y un cierre informal del espacio aéreo declarado por Donald Trump, que llevó a una estampida de aerolíneas extranjeras. La suspensión de vuelos conllevaba además un problema logístico para el traslado de los equipos.
Venezuela tiene previsto organizar un torneo paralelo en las mismas fechas de la Serie del Caribe, la Serie de Las Américas, con representantes de Colombia, Curazao, Nicaragua, Argentina, Cuba y Panamá.
