Con esta restricción, el Botafogo no puede inscribir nuevos jugadores durante las próximas tres ventanas de transferencias. El Glorioso solo podrá fichar si paga la deuda con el club estadounidense.
El acuerdo, cerrado en julio de la temporada 2024, que llevó a Almada al conjunto brasileño, preveía el pago de casi 18 millones de euros al club de Estados Unidos, pero solo se ha abonado una parte.
Así pues, el club de Río de Janeiro ha sido condenado a pagar la suma al Atlanta United por el Tribunal de Arbitraje Deportivo (TAD), la máxima instancia de la justicia deportiva.
El campeón de la Libertadores en 2024 sostiene que la negociación estableció el pago en un plazo de cuatro años, en cuotas, pero el documento enviado por Atlanta a la FIFA exige el abono total hasta el 30 de junio de 2026.
