No hay datos que lo avalen, pero sí sensaciones. Después de haber visto centenares de partidos y goles del delantero parisino, puede que el gol anotado ante el Manchester City en la ida de los play-offs de la Liga de Campeones sea su peor disparo a puerta en toda su carrera deportiva. Le pegó con la tibia, por debajo de la rodilla y fue de tan pésima calidad... que terminó engañando a Ederson, que no se podía esperar semejante fallo.
El balón entró y poco le importó a Mbappé y al Madrid cómo le pegase a la pelota.
El caso es que los delanteros viven de las dianas que consiguen y de las rachas. Y esta es la buena de Kylian. Según datos de Opta para Flashscore, el 9 ha marcado 10 goles en sus últimos nueve partidos en todas las competiciones. Solo su excompañero Ousmane Dembélé, que ha anotado 15 dianas con varios hat-tricks, ha marcado más goles en lo que llevamos de 2025 entre los jugadores de las cinco principales ligas de Europa.
La adaptación de Mbappé ha dado un vuelco radical. Él mismo reconoció que en San Mamés había tocado fondo y desde entonces su vida como madridista ha cambiado radicalmente. En los primeros 27 encuentros como blanco había sumado 14 goles, cifra que para alguien como él no era suficiente.
Este buen momento de forma que pasa el delantero le ha permitido, tras el enfrentamiento en el Etihad Stadium, superar a Thierry Henry en la tabla de futbolistas que han participado en más goles en la historia de la Champions. Mientras el gran Titi marcó 50 tantos y repartió 25 asistencias, su sucesor en Francia ya ha intervenido en 76, con 52 y 24, respectivamente.