Se le acumularon los reconocimientos a la delantera en la cuenta atrás para la Euro: goleadora decisiva en la final de la primera Copa de Campeonas Concacaf a finales de mayo, mejor jugadora de junio en la liga estadounidense (NWSL) y máxima realizadora (10 goles en 13 partidos) antes del parón internacional.
Con este acelerón, el '9' de la Roja llevaba su nombre en Suiza. Titular ante Portugal (5-0) y Bélgica (6-2), la andaluza respondió con tres goles, máxima artillera del torneo junto con su compañera Alexia Putellas.
¿En qué ha mejorado la jugadora que dejó el Real Madrid en 2023 para vestir el negro del Gotham, uno de los apodos de Nueva York, la ciudad imaginaria del universo de Batman?
"El cambio desde que estoy en Estados Unidos es increíble. La NWSL es muy exigente físicamente y el ritmo de competición es muy alto. Entrenar con las americanas me ha dado ese plus", explicaba tras su doblete inicial ante Portugal.
"Luego he entrenado muchas horas de gimnasio para tener esa chispa que necesitamos las delanteras para llegar antes a por el balón y pelearnos con las defensas", añadió.
Conexión especial con Alexia
Esther exhibe una forma espectacular: incansable en la presión, inteligente en las combinaciones, un cuchillo en los desmarques y letal ante la portería.
Todo lo que se podría exigir en un currículum a una delantera de la Roja que tiene por detrás a las mejores jugadoras del mundo. Junto a Alexia, la nutren Aitana, Mariona, Pina o Patri.
Esther, que estuvo un año sin acudir a la selección y se perdió los Juegos de París -España fue cuarta-, debutó como internacional en 2016 -52 partidos, 36 goles-, por lo que lleva casi una década jugando con Alexia.
"Me entiendo muchísimo con ella. Es increíble, a las nueves se las valora por las goles, pero la presión que nos da y el compromiso que tiene... Se queda los balones, ataca la profundidad y marca. Estoy muy feliz por ella", dijo la doble Balón de Oro (2021 y 2022),tras su segundo MVP ante Bélgica.
"Alexia está intratable… A las personas buenas solo le pueden pasar cosas buenas. Se merece todo esto que le está pasando", correspondió Esther en zona mixta.
Trabajar duro y relativizar
A los 32 años, González está de vuelta de todo en el fútbol. Es una estrella 'tardía' en Estados Unidos tras un periplo en España con paradas en Levante, Málaga, Sporting de Huelva, Atlético y Real Madrid.
"No puedo decir que haya sido un camino fácil. Empecé a jugar desde muy pequeña en el equipo de fútbol de Huéscar. Era la única chica, teníamos desplazamientos largos todos los fines de semana, campos de tierra… Tuve que salir con 14 años de casa buscando un sueño muy lejano", reflexionaba tras el título mundial.
Casi dos décadas después acaba de firmar su renovación con el Gotham F.C. hasta 2027 con un salario estimado en unos 500.000 euros, el máximo permitido por la competición.

Un éxito ganado a pulso desde la humildad que se refleja cuando la delantera toma la palabra.
"Para mí no hay ninguna diferencia entre jugar o no, entre marcar o no. Solo pienso en ayudar a mis compañeras. Y, si fallo, siempre pienso que la siguiente la voy a meter", resume sobre su actitud en el campo.
¿Y fuera? Relativizar todo lo bueno que se ha ganado, un discurso infrecuente en el mundo del fútbol.
"Mi vida no depende de venir o no a la selección. Mi vida depende de cómo estoy fuera del fútbol, y creo que soy una persona muy equilibrada. Tengo una familia estructurada y una pareja maravillosa", explica, agradecida y siempre sonriente.