RDT había llegado a la cúspide de su carrera cuando cumplió su sueño de debutar con la selección española absoluta. Era noviembre de 2021 y se le caían los goles en el conjunto periquito. Aquel día formó tridente ofensivo en la España de Luis Enrique con Morata y Pablo Sarabia.
Unos meses más tarde, con diferencias con la directiva espanyolista y declarado en rebeldía, decidió salir y emprender una segunda etapa en Vallecas, donde había anotado 38 goles en 66 partidos. Se marchó en septiembre de 2022 y tuvo que esperar hasta enero para poder jugar de nuevo, pero desde entonces nada ha salido como esperaba. Y para colmo, a la falta de gol y de oportunidades este curso, se le sumó esa "enfermedad común" que le ha mantenido alejado de todo y de todos durante varios meses.

Antes de su retirada temporal, sólo jugó un encuentro en Copa ante un rival de categoría inferior al que marcó dos goles. Luego, la oscuridad.
A mitad de febrero regresó a los entrenamientos y ahora, el 4 de abril, ha vuelto a sentirse futbolista. Poco más de un cuarto de hora en un partido ya resuelto, pero en el que pudo volver a sentir sensaciones que espera poder recuperar de aquí a final de temporada, para intentar contribuir a que el Rayo pueda jugar en Europa la próxima campaña.