De este modo, Ignite Sports Spain, presidido por Gabriel Solares es el nuevo máximo accionista del club pucelano.
Ben Oldman tiene poder de decisión
De este modo, el Real Valladolid pasa a estar controlado por Ignite que posee un 54,36%. Por su parte, el fondo israelí Ben Oldman, que tendrá poder de decisión debido a un pacto de socios, suma el 33,26% de la tarta. Ágora tendrá el 9,65%, y los minoritarios, Ayuntamiento incluido, el 2,73%.
De este modo, Ignite y Ben Oldman se han repartido las acciones que tenía Ronaldo a través de Tara Sports.
Con la nueva presidencia, las primeras decisiones afectarán a la dirección deportiva (todo apunta al nombre de Víctor Orta al frente) y al entrenador del club, que tendrá como objetivo volver a Primera División.