El Comité de Disciplina de la Federación Española de Fútbol ha tomado una decisión acerca de los incidentes acontecidos el pasado domingo en Nervión durante el Sevilla - Betis de la Jornada 14 de LaLiga.
En el tramo final del encuentro, el colegiado andaluz José Luis Munuera Montero se vio obligado a detener el juego un cuarto de hora aproximadamente a causa del lanzamiento de objetos desde la zona del fondo norte ubicada tras la portería.
Desde la RFEF se han inclinado por un doble castigo que conllevará el cierre parcial del estadio Ramón Sánchez-Pizjuán durante tres partidos y una multa de 45.000 euros al Sevilla por infracciones muy graves tipificadas en el artículo 76.2, en consonancia con el artículo 15 del Código Disciplinario de la propia Federación Española.
Con el fin de garantizar el buen cumplimiento de su resolución según el Código Disciplinario de la RFEF, el Comité de Disciplina solicitó al cuadro hispalense que le transmita en un plazo no superior a 24 horas los sectores que conforman el "Fondo norte" desde los que se produjeron los lanzamientos, según lo reflejado en el acta redactada por el trencilla.
También recibió una sanción por su roja directa el delantero Isaac Romero, por lo que los problemas para el Sevilla fueron numerosos.