Agazapado como tantos otros equipos en la Liga MX por el poder económico de unos cuantos clubes, Pumas intenta competir con un presupuesto limitado que ha dejado consecuencias graves en el plano deportivo y, sobre todo, enojo su gente curtida desde el sentido de pertenencia, pero con ganas de celebrar algo.
Pumas cumplirá este 2025 14 años sin ganar el título de liga; una racha dolorosa para uno de los cuatro grandes del fútbol mexicano que construyeron su legado basándose en el talento cientos de figuras emblemáticas.
La rica historia del Club Universidad, representante de la UNAM, la máxima casa de estudios en México, tiene nombres ilustres como Cabinho, Ricardo Ferretti, Jorge Campos, Claudio Suárez, Héctor Moreno y Dario Verón, entro otros. Pero sin duda, el mayor referente de Pumas en su historia es Hugo Sánchez, considerado el mejor futbolista mexicano de todos los tiempos.
Hugo fue pieza clave de los dos primeros títulos de liga de Pumas en su historia (76-77 y 80-81) y en las obtenciones de la Copa de Campeones de la Concacaf (1980) y la Copa Interamericana (1981), antes de partir a España, donde terminaría siendo uno de los mejores jugadores en la historia del Real Madrid con cinco pichichis.
Por si fuera poco, Hugo también fue artífice, como director técnico, de un bicampeonato soñado de Pumas en 2004, erigiéndose —por si había algún despistado todavía— en el máximo ídolo de un club orgulloso de sí mismo.
No obstante, obviando el glorioso episodio de 2011 al coronarse frente al Morelia, Pumas ha carecido, desde entonces, de episodios de gloria e ilusionantes. Esa ausencia de triunfo ha golpeado una y otra vez a una afición leal que no entiende la vida sin sus colores, pero que desea de todo corazón sentirse ganadores de una buena vez.
Es por eso que la llegada de Aaron Ramsey no ha pasado desapercibida, a pesar de que se trata de un futbolista que a sus 34 años ya ha dejado atrás lo mejor de su carrera profesional y que, en el tiempo más reciente, ha jugado poco —afectado por las lesiones que nunca lo dejaron de perseguir— e incluso asumió como director técnico interino en el Cardiff City.
La llegada de Ramsey, junto a la presencia de Efraín Juárez como técnico en el banquillo (ambos comparten el mismo representante) simboliza la renovada ilusión de una afición cansada de ver cómo se queda atrás desde el poderío económico, pero confiada de que el espíritu y la mentalidad de su entrenador los llevará a buen puerto.
Una apuesta que algunos, en busca del sensacionalismo, han descrito como una nueva ‘bomba’ en el últimamente llamativo fútbol mexicano que ha podido gozar de la presencia de André Pierre Gignac, Sergio Ramos, Ronaldinho, Sergio Canales y James Rodríguez, entre otras figuras rimbombantes de primer nivel.
El glorioso Estadio Universitario de la UNAM se alista para ver al galés comandando el mediocampo de Pumas, con la rectoría de la máxima casa de estudios de fondo, y con la fe intacta de que con la visión de juego de Ramsey vendrán tiempos mejores.