Carles Martínez Novell ha charlado con el Country Manager de Flashscore España, Óliver Domínguez, sobre la actualidad de su equipo y su trayectoria profesional, entre muchos otros temas.
¿Cómo está viviendo esta segunda temporada en el Toulouse?
Bien. Es mi segunda temporada como primer entrenador aquí y ya voy conociendo todo un poco más. Sí que es verdad que ha habido cambios en la plantilla en relación a la temporada pasada, pero a la vez, como siempre digo yo también, estimulante, para conocer a nuevos jugadores, para crear nuevas cosas y a la vez aprendiendo de lo que ya vimos el año pasado. Hay un gran número de jugadores que ya estuvieron conmigo y eso ayuda. Esta ha sido hasta ahora una temporada con diferentes momentos. Empezamos, quizás, no tan bien a nivel de resultados, aunque las sensaciones eran buenas a nivel de juego y sobre todo de que el equipo era competitivo y se podía intuir que podíamos estar mejor de lo que realmente los puntos decían. Pero bien, a partir de, más o menos la octava jornada, cogimos una buena racha, hicimos seis victorias de ocho partidos y creo que a partir de ese momento nos tranquilizamos un poco en lo que es la puntuación. Y a partir de ahí nos dedicamos a intentar crecer, a intentar estar mejor. El último mes está costando un poco a nivel de resultados, pero también es parte de esto. Venimos del mercado de fichajes, estamos con bastantes lesiones y es parte también de este trabajo el ser capaz de encontrar soluciones cuando los problemas llegan y esperamos que estos últimos partidos de la temporada nos pongan en un buen lugar.
¿Cuál es el objetivo del TéFéCé a medio plazo? ¿Europa?
Sí, el objetivo del club es crecer. Es nuestro objetivo. Como siempre digo, el club, cuando fue comprado por RedBird, estaba en Ligue 2. En ese momento la ambición era volver a la Primera división, donde está ahora. El objetivo era, por qué no, poder luchar por algunos títulos, como por ejemplo se hizo en los dos años anteriores, incluso ganando la Copa, pudiendo jugar a Europa como fue el año pasado, aunque al ser habiendo ganado la Copa, cayó un poquito más de sorpresa, pero creo que lo logramos merecidamente. Y ahora lo que queremos es eso, seguir creciendo, seguir intentando acercarnos a esos objetivos, al menos a ser competitivos y mantenernos bien, con tranquilidad y con tenacidad, y por qué no ir luchando para estar cerca y, a poder ser, algún año en plazas europeas.

Un presidente peculiar y cercano
Con el presidente, Comolli, el Toulouse es conocido por dar mucha importancia a datos y estadísticas, ¿cómo afecta a la forma de llevar el equipo en el día a día y también en los mercados de fichajes?
Hay dos ciertos momentos. Uno es el ser capaces de valorar y evaluar nuestro rendimiento, no solo en relación al resultado o a los goles que marcamos o los que no marcamos o si llevamos más o menos puntos, sino realmente lo que también nos dicen los datos en relación a si estamos rindiendo, si estamos logrando nuestros objetivos, lo que nosotros queremos, si estamos generando más o menos xG, si realmente somos capaces de llegar no solo a nivel numérico, sino a nivel cualitativo a las zonas que nosotros queremos, tanto en ataque como en defensa.
Todo eso, al final, te ayuda a, no solo valorar tu rendimiento en relación a lo que todo el mundo ve, que son los puntos o los goles, que, por supuesto, son importantes, pero te ayuda a ser un poquito más objetivo. Y como tú dices, el tema de fichajes. Tenemos una clara estrategia a nivel de fichajes, también en lo que se refiere al dónde y al cómo los intentamos encontrar, y a partir de ahí, mi trabajo no deja de ser el de ser capaz de sacarle el máximo de rendimiento a esos jugadores que fichamos, a esos jugadores que tenemos, ya que, como siempre digo yo, si ellos mejoran, estaremos más cerca de ser mejores también en el equipo.
Ese tipo de enfoque, ¿interfiere de alguna manera con su propia visión o la de su staff?
No, yo soy una persona muy abierta a escuchar, a reflexionar. El año pasado, cuando estuvimos en momentos más complicados, nos ayudó a ver hacia dónde teníamos que ir para mejorar. Cuando estamos bien y estamos ganando partidos, los datos nos ayudan también a saber dónde estamos bien y ver si, como siempre, incluso cuando ganamos, tenemos que hacer algo mejor. Por lo tanto, a mí me gusta tener ese feedback más objetivo en relación a lo que pasa, a lo que podemos hacer mejor y a lo que estamos haciendo bien. Y a partir de ahí, lógicamente, mi trabajo es llevarlo al campo, en el feeling, entender los sentimientos de los jugadores, entender el momento, cuándo un jugador está más o menos feliz. Muchas cosas que, lógicamente, esa ya sí que es mi parte, dependen un poco más de la gestión humana. Pero, lógicamente, como siempre digo, se trata de encontrar el equilibrio entre los datos y la humanidad o la pasión que también tiene este equipo.

Volviendo un poco a la figura de Damien Comolli, quien tiene por sí mismo una muy buena trayectoria en el mundo del fútbol, ya que fue jugador en el Arsenal y también tuvo cargos en el Liverpool y en el Tottenham. ¿Cómo afectaría esa experiencia a la estrategia del club en los mercados de fichajes y también en la visión general de la entidad?
Lógicamente, también es una persona muy importante, seguramente el más importante en este club. Él es quien ha construido esto, desde la compra del club, con su experiencia y yo soy una persona que me gusta escuchar y aprender de todos. Creo que, a la vez, tengo la personalidad como para saber canalizar la información que recibo hacia lo que realmente siento que tengo que hacer en mi rol, que es el entrenador. Pero tenemos una relación muy buena. A mí me encanta, me gusta mucho escucharlo y, a partir de ahí, valorar todas las cosas porque la experiencia es un grado y, lógicamente, la experiencia que él tiene en el máximo nivel está a años luz de lo que yo he vivido.
¿Puede decir cómo es trabajar juntos para lograr los objetivos y cómo está siendo esa experiencia para usted?
Bueno, yo con él tengo una relación en la que ambos sabemos que, en cualquier momento, él puede venir a mi despacho, y yo al suyo, él puede llamarme, yo puedo llamarlo a él y, a partir de ahí, tenemos una reunión semanal donde hablamos de todos los temas que consideramos importantes de nuestro equipo, de las cosas que pueden ser mejor para el futuro, también a nivel de estructura del club… un poco de todo. Tenemos una relación impresionante.
La Ligue 1, una liga competitiva y con calidad
¿Considera que está logrando asentar su filosofía en el Toulouse y en la Ligue 1 o es un proceso continuo?
Yo siempre digo que el fútbol va mucho en relación a los quiénes, a los jugadores que tenemos. Al final, el año pasado se vio una evolución clara desde el principio hasta el final de temporada. Este año creo que, en muchas cosas, estamos más asentados en relación a la temporada anterior, pero, a la vez, con jugadores nuevos hemos tenido que saber encontrar cómo potenciarlos, cómo ellos se pueden sentir más cómodos para poder rendir. Yo creo que esta es un poco la clave. Tengo mis ideas, creo en ellas, en el fútbol que ofrecen, pero, a partir de ahí, también tengo que encontrar el buen equilibrio entre lo que yo puedo y pienso y lo que realmente el jugador es capaz de hacer. Como siempre digo yo, todo el mundo puede aprender, todo el mundo tiene que aprender, pero, a la vez, hay cosas que quizás tú tienes que ser capaz de valorar si el jugador lo va a disfrutar, lo va a poder hacer, si se está sintiendo a gusto. Cuando tú estás jugando con 11 jugadores que se están sintiendo a gusto todo es mucho más fácil a la hora del rendimiento.
Más de la mitad de los entrenadores de la Ligue 1 son extranjeros, ¿es un destino más atractivo que en el pasado?
A mí me gusta mucho la Liga, no es porque esté aquí. Yo pienso que es una liga muy atractiva, con mucho talento, con muchos jugadores jóvenes que pueden llegar a ser increíbles. Los partidos son muy igualados, de hecho, a todo el mundo nos cuesta mucho ganar un partido, incluso a los equipos de arriba. Yo creo que esto se está viendo también en la Champions League. Cuatro equipos de Francia se han clasificado para la siguiente ronda. Yo creo que la liga francesa es una liga que da muchas oportunidades a la gente joven y en este caso también, a la vez, se está abriendo a que puedan venir entrenadores de fuera para poder compartir nuestras ideas.

Habla del nivel de la Ligue 1, ¿qué piensa de las declaraciones de Cristiano Ronaldo diciendo que la Saudi Pro League es superior a la Ligue 1, usted que estuvo en Catar y Kuwait? ¿En qué posición sitúa la Ligue 1 dentro de las ligas europeas?
Nunca voy a opinar de algo que no conozco, yo no he estado en nada de la liga saudí. No conozco la liga como para poder hablar de ella. Lo único que sé es que la Liga francesa es una liga muy buena. Cada vez que jugamos contra equipos de otras ligas, a todo el mundo le cuesta mucho poder sacar puntos contra los conjuntos de la liga francesa. Estoy convencido de ello, y mira cuántos jugadores son capaces de ir a otras ligas también. Por lo tanto, no tengo ninguna duda de que la Ligue 1 es una liga que tiene mucho potencial. A partir de ahí, si es mejor que otras, no es algo que vaya a discutir.
¿Considera positivo para la Ligue 1 la presencia de un equipo con un presupuesto tan superior al resto como es el PSG?
Es lo que es, al final es así. Este año el Marsella se esté reforzando bien, el Mónaco está fichando mucho joven, espero que en el futuro le ayude mucho. A mí me gustaría, lógicamente, que la liga, de cara al exterior, fuese un poquito más competitiva a la hora de saber quién la puede ganar. Pero también, al final, yo veo y sé lo que le cuesta al PSG ganar sus partidos. Y a partir de esto, ya no sólo es el quién gana la Liga, pues está muy competido ahora mismo el quién puede ir a Europa. La Ligue 1 está igualadísima en ese aspecto. Yo estoy en mitad de la tabla y vemos que podemos estar no muy lejos de plazas europeas, pero a la vez estás no muy lejos de abajo. Eso hace que, al final, la Liga tenga buen valor, tenga buen nivel. Y, repito, sí, ojalá estuviera todo un poquito más igualado, como veo que a veces pasa en la Premier, que los ingresos de cada uno son un poquito más equitativos, pero eso no es mi parte.
La filosofía de cantera del Espanyol y del Barça
Usted pasó cinco temporadas en la cantera del Espanyol. ¿Cómo valora la presencia en el equipo de jugadores que ahora son muy importantes en la plantilla y vienen de la cantera como son el meta Joan García o Javi Puado, que es capitán?
Como siempre digo, ojalá hubiera más. Yo he entrenado generaciones muy buenas de Espanyol. Le debo mucho a ese club y sé que, en el momento en el que se les dan las oportunidades, los jóvenes las aprovechan. Es el caso de Joan, pero a la vez está Ángel Fortuño, que es el portero reserva, que sé que si jugara seguramente sería exactamente lo mismo. Pasa con Javi Puado también, pero pasó con Nico Melamed, o jugadores como Arnau Puigmal, que ahora está en Almería, que podrían estar allí. También me viene a la cabeza Dani Villahermosa, entre muchos otros.
Al final, sé que, si realmente se les diera la oportunidad, lo estarían haciendo también muy bien. El nivel de la cantera del Espanyol es muy bueno y, por lo tanto, yo creo que todo el mundo sabe que, si al final tienen las oportunidades, rendirán. Como Jofre. A Jofre, por ejemplo, yo lo entrené en el Infantil A y mira cómo está rindiendo y el buen nivel que tiene. Los chicos siempre dan su nivel porque son buenos. Realmente es así.
También tuvo un paso como técnico por la cantera del Barcelona. ¿Cuál cree que es la clave del éxito de la Masía? Recientemente ha producido talentos que están en el primer equipo, como Casadó, Cubarsí, Gavi, Lamine o Fermín.
Bueno, yo creo que el Barça, igual que el Espanyol, pero creo que incluso más en el Barça, al final hay una idea muy clara en lo que se quiere, de cómo se juega. Pero, sobre todo, el otro día lo dijo Arteta, habla de la Masía de hace 40 años, pero es que realmente es algo que es así. Es la competitividad que hay ahí dentro, sana, pero al final los equipos suben con un buen ambiente, con muchas ganas de ser mejores. Al final hace que, en cada entrenamiento, en cada tarea, el jugador tenga que rendir, tenga que dar su máximo, que valoren lo que cuesta. Y, entonces, desde que tienen siete u ocho años, saben que tienen que estar bien, que tienen que rendir. Y eso al final yo creo que también hace que cuando lleguen al primer equipo, pues esa presión, entre comillas, la lleven muy bien. Aparte de que los grandes talentos que tienen son fenómenos, pero creo que es una de las grandes claves.
Ha mencionado brevemente el caso del Barcelona por el juego. Usted que ha sido técnico de cantera y técnico de primer equipo, ¿qué diferencias ve cuando un jugador que sube de la cantera tiene la misma idea de juego cuando está desarrollándose que cuando está en el primer equipo?
Mi mentalidad como entrenador siempre ha sido que da igual siendo más joven o más grande, cuando vamos a un entrenamiento, cuando vamos a un lugar, lo que queremos es hacer lo mejor posible. Eso no quiere decir que se haga, pero al menos quererlo. Siempre digo a mis equipos que, si ellos quieren, podemos luchar por lo que realmente deseamos. Cuando alguien no quiere, ese es realmente el problema. Yo creo que eso al final es la clave. Yo no siento tanta diferencia entre la base y el primer equipo. Yo creo que al final un jugador tiene que ir a entrenar para aprender, y un jugador tiene que ir a entrenar para competir. Y en clubes de Primera división, al final esa es la realidad. Yo lo he sentido así. Lógicamente, claro que hay diferencias. No es lo mismo tratar a un niño que tratar a un adulto. No es lo mismo los problemas que tiene un chico de 14 años que los que tiene un adulto de 25. No es lo mismo tener un contrato profesional que no tenerlo. Hay mil cosas que son diferentes, pero al final son personas con el mismo objetivo, que es mejorar. En cómo se vive el entrenamiento en el fútbol profesional o en el formativo tampoco creo que haya tanta diferencia. Al menos en mi manera de verlo.
Dembélé y Mbappé
Cuando usted aún estaba en el Barça llegó allí un tal Ousmane Dembélé, que quizá sea de los jugadores más en forma actualmente, ¿cómo vio al jugador por entonces y cómo lo ve ahora? ¿Cuál cree que es la clave de su rendimiento actual?
El fútbol es confianza. Nosotros podemos trabajar mucho la táctica, podemos intentar hacer mil cosas, mil variaciones, pero, al final, cuando un jugador está bien, cuando el jugador está feliz, cuando el jugador está en su mejor momento, todo fluye más fácil. Ese pase que tú quieres hacer entre líneas, entra. Ese chute que quieres hacer a la escuadra, va a la escuadra. Cuando estás un poquito más negativo, las dudas pueden llegar y hace que al final lo hagas un segundo más tarde, que lo hagas un poquito con más dudas, etc. Dembélé, a mí, siempre me ha parecido un jugador brutal. El año pasado, cuando jugué contra él la primera vez aquí en el estadio, la primera vez entró en el minuto 70 o 65 de partido. Me acuerdo de que la primera vez que toca al balón es delante mío, ante Gaby Suazo. Nos quedamos diciendo que con ese primer toque te supera con la finta, con la derecha, con la izquierda… Es verdad que ahora mismo encima está marcando goles, pero antes creo que su juego generaba muchos espacios para los otros y ahora mismo genera lo mismo y además marca. Cuando un jugador está así es muy difícil de parar.

Usted se enfrentó varias veces a Kylian Mbappé, ¿qué problemas representa un jugador así para un entrenador? ¿cómo se puede preparar al equipo para pararlo o minimizarlo?
En todos los partidos analizamos a los rivales, analizamos a lo que nos podemos encontrar y cuando juegas con jugadores así, como has dicho, con Dembélé hoy, o el año pasado, también con Kylian, los jugadores los conocen, saben lo que pueden y deben intentar evitar, pero al final el talento es enorme. Es estar muy concentrado, es estar siempre metido, es intentar minimizar sus cualidades, pero a partir de ahí, por ejemplo, Mbappé era un jugador que a veces podía parecer que no estaba y de golpe te aparecía y en un disparo o en una acción te metía un gol. Es difícil a veces de controlar porque hay jugadores que necesitan tocarla para generar mucho, pero Mbappé no, pero si todo el mundo supiéramos cómo pararlos seguramente no serían de los mejores jugadores del mundo.
Cásseres y Creswell
¿Cómo está viendo la evolución de Cristian Cásseres, ya en su segunda temporada en Toulouse?
Bien, estoy muy contento con él, eso es algo que en mi trabajo valoro mucho, y es que jugadores que llevan tiempo con nosotros, yo siento que están creciendo, que están mejor, porque si ellos están así, se sienten mejores, están mejor de confianza, como te comentaba, y por lo tanto pueden rendir mucho mejor. Estoy muy contento de su adaptación, viene de una liga diferente, de la MLS, donde al final los espacios y las interacciones quizás serán un poco diferentes, como mi manera de pensar quizás. Pero es un jugador que, como digo muchas veces, ponme once 'Cristians' en el campo porque realmente su compromiso siempre está ahí, puede jugar mejor, peor, pero, al final, siempre compite.
Y la última, sobre otro de sus jugadores, el inglés Charlie Creswell, ¿cree que puede llegar a ser un fijo en la selección inglesa absoluta?
Por eso trabajamos, él está en la sub-21, lo fichamos, venía del Leeds, al final está jugando mucho, está creciendo, él quiere, como te he dicho. Para mí es lo más importante, el querer mejorar, el querer crecer e igual que hasta ahora puede llegar a la sub-21, pues por qué no, puede llegar al primer equipo. Siempre lo hablamos, para nosotros en Toulouse, para mí, para los jugadores, cada vez que alguien recibe una convocatoria de la absoluta es un orgullo porque quiere decir que algo hacemos bien y sobre todo porque el jugador está feliz y realmente de eso se trata.
Pues eso es todo, muchísimas gracias Carlos Martínez Novell, muchísimas gracias también a Toulouse, por acceder a la entrevista, le deseamos lo mejor en lo que queda de temporada y que siga muchos años.
Muy bien, muchas gracias a vosotros, un placer.