El Mundial regresa a Norteamérica después de EE.UU. 94. Aquella edición vio triunfar a Brasil, que logró vencer en la final, por penaltis, a Italia. Fueron recuerdos amargos para los aficionados azzurri.
En cambio, las sensaciones vividas por los brasileños, liderados por Dunga, fueron de alegría al llevarse el trofeo a casa.
Y en Washington, donde todo está a punto de ponerse en marcha con el sorteo de 2026, la leyenda brasileña ha atendido a la prensa. Junto a él, otros protagonistas mundialistas como el estadounidense Marcelo Balboa, el mexicano Luis Hernández, “El Matador”, y el canadiense Atiba Hutchinson.
El sueño de Dunga
Para Dunga, capitán de aquella Brasil campeona del mundo, Pasadena fue “el sueño de un niño hecho realidad”. Para Balboa, referente de Estados Unidos, el 94 fue “el trampolín” de todo lo que es hoy el fútbol estadounidense. Para Hernández, ídolo de los aficionados mexicanos, aquellos fueron “recuerdos maravillosos” que siguen acompañando a toda una generación.
"Creo que es el sueño de cualquier niño. Cumplirlo, jugar un Mundial, disputar una final. Veía muchas veces esa imagen del 70: los jugadores de la Seleção subiendo las escaleras para recibir el trofeo. De pequeño, ese era mi sueño. Imaginaba que algún día podría jugar para Brasil".
La final de Pasadena, en el Rose Bowl, fue un sueño cumplido, aunque a costa de Italia. Una final trágica para los azzurri, que cayeron ante Brasil en los penaltis. "Participar en ese partido fue algo magnífico. Y además, Brasil ganó".
El excapitán brasileño, incluso hoy, no oculta la emoción por un título que lo consagró para siempre en la historia del fútbol. "Todavía hoy veo esas imágenes en la televisión. A menudo tengo que detenerme un momento y, a veces, me emociono, porque entiendes lo importante que es ganar un título mundial. Ahora llevamos casi 24 años sin ganar el Mundial. El fútbol nos regala momentos fantásticos". Y sobre Brasil en el próximo Mundial: "Queremos ganar".
Marcelo Balboa, el inicio de una aventura
Entre los anfitriones está Marcelo Balboa, exjugador de la selección estadounidense y protagonista de aquella lejana cita del 94. Ese Mundial, el estadounidense, impulsó el fútbol en América del Norte.
"El Mundial del 94 fue un trampolín, porque por fin teníamos una liga profesional y éramos un grupo de chicos que llevaban años entrenando juntos para prepararse para un Mundial. Nadie sabía lo que iba a pasar".
"Pero cuando hablamos de ese Mundial, para nosotros fue probablemente el punto de partida de lo que hoy vemos en la Major League Soccer, porque todos querían entender qué era realmente el Mundial".
"Habíamos jugado en el 90, no nos fue mal, y después, cuando se anunció que el Mundial llegaría a Estados Unidos, se notaba la curiosidad de la gente: '¿Qué es el soccer? ¿De qué va este Mundial?'".
"Ese punto de partida dio impulso al 'soccer', convirtiéndolo en uno de los deportes más seguidos en Estados Unidos. Para todos nosotros fue una lección, pero también el trampolín hacia lo que queríamos ser: un país donde el fútbol, que entonces era considerado el quinto deporte, pudiera crecer hasta convertirse en el número uno. Y seguimos luchando por eso. Pero si miras todo lo que hemos construido desde 1990 hasta hoy, con el 2026 a la vuelta de la esquina, verás algo realmente especial en 2026".
Luis Hernández, 'El Matador'
Otro rostro épico de la historia mundialista es Luis Hernández, para todos 'El Matador'. Exdelantero de la selección mexicana, máximo goleador de México en Francia 98, sigue siendo considerado uno de los mejores atacantes en la historia del país.
"Tengo recuerdos maravillosos de esa edición. Fue mi primer Mundial y poder marcar cuatro goles para mi selección, y ser alguien muy importante para nuestro país, fue increíble. Tan increíble que seguimos reviviéndolo cada vez, donde sea que estemos. Fue algo especial, realmente único".
"Nosotros, como mexicanos y como país anfitrión, queremos dar lo mejor para todo el mundo. Esperamos ser los mejores anfitriones, los mejores para todos, y para todo lo que representa el fútbol mexicano, el fútbol en México. Creo, y estoy seguro, de que lograremos honrar el nombre de México".