El domingo, el Arsenal saltó al campo en el estadio St. James' Park sabiendo que el Liverpool había perdido por un gol en los minutos finales ante el Crystal Palace, y que los Gunners podían acercarse a solo dos puntos de los Reds si lograban vencer al Newcastle.
Después de haber perdido sus tres últimos partidos en todas las competiciones en Tyneside sin marcar, incluso sacar un empate parecía una tarea complicada.
Además, si los aficionados de los Gunners buscaban señales negativas, el Arsenal no había ganado sus dos últimos partidos fuera de casa cuando el capitán del día era Bukayo Saka, quien lideró al equipo en lugar de Martin Odegaard: 2-2 frente al Manchester City en septiembre de 2024 y 0-1 ante el Newcastle en noviembre de 2024.
El Arsenal comenzó con fuerza
El equipo de Mikel Arteta no permitió que los pensamientos negativos afectaran su preparación para el partido, y los visitantes salieron con todo, generando tres remates a portería —dos de ellos al arco— en los primeros seis minutos del encuentro.
El intento de Malick Thiaw y Sandro Tonali por frenar el ritmo no duró mucho, ya que Eberechi Eze y Riccardo Calafiori tuvieron una participación destacada para los Gunners.
A pesar de dominar la posesión, no pudieron evitar que un brillante cabezazo de Nick Woltemade (tras un centro de Tonali) terminara en gol poco después de la media hora -apenas la sexta vez en la historia que un jugador del Newcastle marca en sus dos primeros partidos en casa-.
Sería el único remate, tanto dentro como fuera del arco, del delantero alemán en el partido, pero con una hora por delante, los visitantes tenían tiempo suficiente para buscar la remontada.
Historial de enfrentamientos tras ir por detrás
Lo importante es que las Urracas habían evitado la derrota en sus ocho partidos previos de Premier League cuando marcaban primero.
Además, considerando el mal registro reciente del Arsenal en St. James' Park y el hecho de que no había ganado ninguno de sus últimos cinco partidos de Premier League tras encajar el primer gol, había motivos para pensar que podía ser otro día favorable para el Newcastle.
Al descanso, Declan Rice fue el jugador más activo sobre el césped, y con 22 toques en el área rival, quedaba claro que, aunque no marcara, era el Arsenal quien llevaba la iniciativa en el partido.
Esto se debió, en gran parte, a la calidad del equipo moviendo el balón.
Así como el Newcastle sufrió persiguiendo sombras ante el Barcelona, volvió a pasar lo mismo, con Martín Zubimendi especialmente destacado (90% de precisión en los pases).
De nuevo, los visitantes dominaron tras el descanso, con cuatro remates y un 76,7% de posesión en los 15 minutos previos a la hora de partido.
La falta de gol se debió a la gran actuación individual de Nick Pope, quien ya había realizado cinco paradas para frenar a un Arsenal muy ofensivo. Dan Burn también merece reconocimiento, ganando el 100% de sus duelos defensivos, además de una intercepción y seis despejes.
Mikel Merino, al rescate
Junto a las ocho despejes de Thiaw y 11 más de Sven Botman, se estaba viendo una actuación defensiva brava de las Urracas, algo que la afición local supo valorar.
Rice siguió atacando al equipo local, y a medida que el partido entraba en la recta final, nadie había completado más pases exitosos (57) ni había tocado más veces el balón (75) que el incansable internacional inglés. En los minutos finales, Viktor Gyokeres pudo considerarse desafortunado, ya que ninguno de sus seis remates terminó en gol.
Sin embargo, cuando todo parecía perdido, Mikel Merino, conectó un cabezazo tras un gran centro de Rice y superó a Pope para marcar su primer gol de la temporada en la Premier League.
Con ese tanto, el internacional español también se convirtió en el máximo goleador de los londinenses en la Premier League en 2025, con siete goles en total.
Gabriel rompe los corazones del Newcastle
Con seis minutos más el tiempo añadido por jugar, había muchas posibilidades de que los Gunners encontraran el gol de la victoria si seguían atacando. Y así fue.
En un córner en el minuto 96, Gabriel se elevó por encima de todos y anotó el gol del triunfo, el primero desde noviembre de 2024 ante el West Ham.
Para poner en contexto la importancia de ese gol, el Arsenal no ganaba tras ir perdiendo al descanso en la Premier League desde el 4 de marzo de 2023 ante el Bournemouth (13 partidos).
Eddie Howe seguramente estará decepcionado con el resultado final, aunque solo tiene que mirar lo mucho más activo que estuvo el rival para entender por qué fueron ellos y no las Urracas quienes se llevaron los tres puntos.
Jurrien Timber, por ejemplo, volvió a brillar. Participó en 17 duelos individuales, ganando seis a ras de césped. Además, fue el tercero con más remates en el área rival y el cuarto con más toques.
El Newcastle simplemente no estuvo a la altura en ataque, y solo tres remates a puerta en casa obligarán a Howe y su cuerpo técnico a replantear la estrategia.
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