En la rueda de prensa posterior a la victoria, el entrenador no ocultó su enfado por el rendimiento defensivo en los últimos instantes del partido. Filipe Luís fue muy claro al expresar su malestar.
“Odio encajar goles. Me conocéis bien, doy mucha importancia a la fase defensiva del equipo. Lo valoro muchísimo, estoy convencido de que la defensa es la mejor arma para ganar un campeonato. Nos ha costado mucho llegar hasta aquí con estos números tan bajos de goles recibidos".
El técnico hizo hincapié en que este apagón debe servir de aviso para la plantilla en la recta final del Brasileirão. "Que este susto nos sirva de lección. En el campeonato, y quizá en el fútbol mundial, si bajas la guardia un minuto, lo pagas caro. Ya se lo he dicho, no me preocupa porque es un caso aislado, pero duele. Odio que pase esto", ha afirmado.

Filipe Luís también ha destacado la importancia de la pausa por la fecha FIFA, que servirá para corregir errores y recuperar conceptos tácticos que, según él, “se han perdido” en los últimos partidos.
“Necesitamos mucho tiempo de entrenamiento. Por desgracia, tenemos muchos convocados, pero necesito recuperar comportamientos, recuperar conceptos que se han ido perdiendo. Hoy, en ciertos momentos del partido, no me reconocí cuando vi al equipo partirse o acelerar tanto el juego, como pasó sobre todo en la primera parte".
Con el triunfo rubro-negro y la derrota del Palmeiras ante el Mirassol, el Flamengo llegó a 68 puntos e igualó al líder en la tabla, quedando por detrás solo en número de victorias. El Flamengo volverá a jugar tras la fecha FIFA para enfrentarse al Sport como visitante.
