Tras complicaciones en las últimas horas, Jorge María Bergoglio, conocido en el mundo como el papa Francisco, falleció en la capital a los 88 años. Su salud se había deteriorado en las últimas semanas, desde que fue ingresado en el hospital Gemelli de Roma debido a una bronquitis, que más tarde se convirtió en neumonía bilateral, y había empeorado, provocando una crisis respiratoria.
El Vaticano anunció el fallecimiento el lunes por la mañana, casi 24 horas después de una breve aparición durante las celebraciones de Pascua. "A las 7.35 de esta mañana, el Obispo de Roma, Francisco, regresó a la casa de su Padre. Toda su vida estuvo dedicada al servicio del Señor y de su Iglesia", reza el comunicado emitido por el cardenal Kevin Farrell.
Jorge Mario Bergoglio era Papa desde el 13 de marzo de 2013 y era el 266º en la historia de la Iglesia católica, tomando el nombre de Francisco tras su elección, en honor a San Francisco de Asís.
Gran aficionado y coleccionista de fútbol
Argentino de nacimiento, pero italiano de origen (sus antepasados eran de Piamonte y Liguria), desde antes de su proclamación nunca ocultó su pasión por el fútbol, deporte que él mismo practicó como portero en Buenos Aires.
Una pasión que obviamente ha transmitido a su bisnieto, recientemente adquirido por un equipo umbro que juega en la Serie D, el Trestina.
A lo largo de su vida, Bergoglio asistió a menudo a los partidos de su equipo favorito, el San Lorenzo, ganador de la Copa Libertadores en 2014, durante su pontificado.
Desde que es papa, ha recibido cientos de camisetas de fútbol como regalo de clubes de todo el mundo, que año tras año, visita tras visita, le han honrado con sus uniformes oficiales y otros recuerdos únicos.