Lo que hasta la tarde parecía un rumor confirmado terminó oficializándose la noche del jueves 11 de diciembre - madrugada del viernes 12 en Europa-: Jorge Fossati dejó de ser entrenador de Universitario de Deportes, según anunció el propio club. Tras largas conversaciones, ni el técnico ni la institución lograron un acuerdo y optaron por dar por finalizado el contrato que, en principio, los vinculaba hasta diciembre del 2026.
Desde hacía varias semanas, el uruguayo había mostrado dudas sobre su continuidad, señalando que aún debía sostener una reunión clave con la administración provisional liderada por Franco Velazco. Ese escenario abrió una serie de interrogantes en plena preparación del plantel para la temporada próxima, complicando el armado deportivo.
Aunque Fossati tenía contrato vigente por un año más, pidió una adenda con mejoras económicas y mayor autonomía para tomar decisiones operativas y logísticas. La directiva evaluó estos pedidos, que quedaron como puntos centrales en la mesa de negociación.
La presencia de Pablo Betancourt, representante del entrenador, marcó un giro en las conversaciones. Tal como informó el periodista Gustavo Peralta, el agente presentó nuevas exigencias económicas que distaban de las condiciones iniciales, trabando el proceso y empujando a una ruptura.
Tras una última reunión el miércoles, ninguna parte cedió en sus posiciones, y el desenlace se volvió inevitable. La separación se dio en buenos términos, por lo que no habrá indemnización para ninguno de los involucrados.
Finalmente, la 'U' hizo pública la decisión mediante un comunicado, señalando que el vínculo contractual con Fossati había concluido tras el proceso de negociación. El club también agradeció al técnico y a su comando por el profesionalismo y por los logros obtenidos, entre ellos los títulos nacionales de 2023 y 2025 que consolidaron el tricampeonato.
Antes de cerrar el mensaje, la institución expresó que la salida permitirá que ambas partes sigan sus caminos con claridad y les deseó éxito en sus futuros desafíos.
Con la partida del 'Nono', el director deportivo, Álvaro Barco, y su equipo deberán elegir al nuevo entrenador para el 2026, un año en el que la exigencia crecerá: mejorar la actuación internacional y pelear por el objetivo mayor, el tetracampeonato.
