Tras una victoria contra Australia (25-7) y otra ante Fiyi (38-18), los británicos, que comenzaron con un adverso 0-12, lograron remontar contra los All Blacks gracias a su potencia física y al pie de George Ford, autor de dos drops.
Anotaron cuatro tries para asegurar su 10ª victoria consecutiva.
La diferencia final de 14 puntos es la más amplia a favor de los locales después de la que se vio en la victoria por 38-21 de 2012, el último triunfo inglés en casa contra Nueva Zelanda.
Desde entonces, el XV de la Rosa solo había ganado en 2019, en la semifinal del Mundial en Japón.
Ford se resarce
George Ford, el héroe desafortunado del último partido entre estos dos equipos en este mismo campo en 2024 (derrota por 24-22), debido a su falta de precisión frente a los postes, esta vez fue uno de los grandes artífices de la victoria inglesa.
Su buen hacer quedó en evidencia al final del primer tiempo, donde sus dos drops en dos minutos (38' y 40') permitieron que su equipo se acercara a un punto (11-12).
Después, ya en el segundo acto, brilló con su juego de pie preciso.
